Reseña: 66 noches con Luna

*En colaboración con Pluma de Cristal

Título: 66 noches con Luna.
Autora: Mercedes Morón Alonso.
Ilustración: Gemma Martínez.
Corrección: David Pierre.
Editorial: Pluma de Cristal.
ISBN: 978-84-949013-3-1
Año de publicación: 2017.
Edición: Papel.
Páginas: 78.
Género: Prosa poética.

Hay romances de leyenda y leyendas que intentan sepultar el amor tras nombres famosos, profecías y sueños cumplidos. Pero también hay noches donde nadie ve y las palabras son como el susurro de los árboles.

Luna sí tuvo su leyenda, pero también sus sesenta y seis noches.

★★★★

Siento que me voy a repetir en el inicio de esta reseña, pero tengo que hacerlo. Mis disculpas a los lectores habituales que empecéis a casaros de lo que viene a continuación.

66 noches con Luna me lo envió, en aquel famoso y primer envío de colaboración, la editorial Pluma de Cristal. Vais a leer la segunda reseña de ese paquete y, ahora puedo decir que, no tardaré mucho en subir las otras dos que quedarían para terminar con la colaboración, ya que estoy leyendo Lágrimas de Aren y No hay rosas sin espinas y ¡me están enganchando muchísimo!

Después de esta mini actualización de mis lecturas, empecemos con lo que interesa:

Opinión Personal

En 66 noches con Luna conoceremos a Luna Vientodesol, Astaroth y su historia de amor imposible.  Lo siento, pero no puedo deciros mucho más si no queréis spoilers. En este libro de Mercedes Morón Alonso viviremos junto a los protagonistas sus noches juntos, a través de sesenta y siete capítulos muy cortitos, de una página, y las preciosas ilustraciones de Gemma Martínez.

Ojalá pudiese obligar al sol a no salir nunca más.

Puedo decir, y lo corroboraríais si vierais todos los post-it que tiene desde la primera página, que es un libro precioso, con una prosa que te enamora y te hace meterte en la piel de los protagonistas hasta límites insospechados. Me sorprendió mucho descubrir que Luna y Astaroth habían llegado a ser algo más que simples personajes; había llegado a conocerlos y a entenderlos, que no es poco, y todo eso en tan pocas páginas.

Y se consumían en los besos que no se daban. Se envenenaban con los que sí, con el triste silencio de las despedidas y las horas a oscuras.

Si no tenéis mucho tiempo, pero os apetece leer algo que os llegue al corazón, os aseguro que podéis contar con 66 noches con Luna. Lo deboraréis y os escantará. No lo dudo.

Pero Astaroth también olvidó que un tonto enamorado es tonto dos veces.

Citas de 66 noches con Luna

Era vida a base de noche y pinceladas de día.

Pero hasta esa noche no había comprendido que lo bonito de la vida es que haya alguien más que crea en ti, que te levante del suelo cuando tú no seas capaz de hacerlo.

De  todos modos, ¿para qué iba a desear la mismísima luz un descenso a los infiernos?

Y vosotros, ¿habéis leído 66 noches con Luna? ¿Os ha gustado? Si no lo habéis leído, ¿os ha llamado la atención? ¿Tenéis intención de leerlo?

Esto es todo por hoy, ¡muchas gracias por vuestro tiempo!

Si no seguís Con un marcapáginas, no esperéis más para no perderos nada.

Nos leemos pronto en una nueva entrada.